gazpachuelo malagueño

No creo que haya plato más auténtico de la cocina malagueña que el gazpachuelo, salvo quizás el ajoblanco, su alter ego veraniego. A pesar de su sencillez, es un entrante caliente delicioso y energético. Su versión más primitiva apenas lleva más que huevo y agua, acaso algo de pan, aunque yo prefiero añadir unas patatas para enriquecerla. Esta es mi receta del gazpachuelo, sopa tradicional malagueña

Hoy día muchas amas de casa añaden unas gambas peladas, incluso algo de pescado blanco. El secreto, si es que lo tiene, es una mayonesa de las de antes, hecha a mano. Las claras se aprovechan para cuajarlas en el caldo. Para ahorrar tiempo puedes hacer una sencilla mayonesa de huevo entero, y añadirla al caldo templado, aunque yo prefiero la forma tradicional.

Ingredientes, 4 personas

1,5 litros de agua, 800 gr. patatas, una cucharada de sal, 3 huevos medianos, 200 cc. aceite de oliva virgen. Pan en dados (opcional).

Elaboración

Calienta el agua con la sal en una cazuela. Añade las patatas peladas y cortadas en rodajas finas. Deja cocer a fuego medio 20-25 minutos, o hasta que las patatas estén muy tiernas.

Si quieres, puedes desmenuzar unas cuantas patatas para que espesen mejor el caldo.

Mientras se cuecen las patatas, separa las claras de las yemas. Ponemos las yemas, mejor a temperatura ambiente, en un plato de loza llano. Con el dorso de una cuchara vamos batiendo con movimientos circulares, sin levantar la cuchara del plato, y añadiendo el aceite en hilo fino, muy poco a poco, hasta que emulsione la mayonesa.

Esto parece difícil, pero en unos 5 minutos la tendremos lista. Reserva en frío.

Una vez estén las patatas tiernas, añade las claras al caldo, removiendo para que se cuajen, a fuego lento. Aparta del fuego y deja templar la sopa, unos 3-4 minutos. Añade un poco del caldo templado a la mayonesa de yemas, puesta en un bol, removiendo para que se mezcla bien.

Una vez mezclado, añade al resto del caldo, en la cazuela, y remueve hasta que quede bien mezclado todo. Puedes calentar un poco, a fuego muy lento, pero con cuidado de que no hierva, ya que se cortarían las yemas en el caldo y arruinaría la sopa. Ajusta de sal, si fuera necesario.

Sirve caliente este gazpachuelo, sopa tradicional malagueña en platos soperos o cuencos, acompañando, si quieres, de unos dados de pan tierno, crudos. Si te sobrara, recuerda que al recalentarla no debe hervir en ningún momento.