El cuscús o cous-cous es un plato tradicional del Magreb, que se prepara con ingredientes sencillos, sémola, verduras y a veces alguna carne o incluso pescado. Esta vez lo he preparado con carne de cordero y pollo, aunque puedes hacerlo sólo con pollo, o con pollo y ternera, y con habas frescas, que ahora están en temporada. Esta es mi receta de cuscús con habas, canela y azafrán.

Si las habas son frescas y tiernas, las puedes usar con su piel o vaina, o bien usar sólo las semillas. Si no es época de habas las puedes usar congeladas.

Ingredientes, para 4 personas

500 gr. sémola de cuscús precocida, 300 gr. pollo en trozos, 300 gr. carne de cordero troceada (paletilla, costillas), una cebolla, 100 cc. aceite de oliva virgen, 300 gr. tomates pelados, 200 gr. habas frescas desagranadas, una hoja de laurel, unas hebras de azafrán, una cucharadita de canela molida, sal, pimienta, 500 cc. caldo de pollo o verduras, perejil, para decorar.

Elaboración

Saltea en una cazuela de fondo grueso la cebolla picada con el aceite de oliva, unos 4 minutos o hasta que empiece a estar tierna y transparente, sin dorarse. Añade las carnes salpimentadas, dejando dorar a fuego vivo, removiendo de vez en cuando, unos 10 minutos.

Cuando las carnes estén doradas, añade los tomates troceados (pueden ser en conserva). Baja el fuego, añade las habas, ajusta de sal y pimienta y deja saltear 4-5 minutos. Cubre entonces con el caldo, el laurel, el azafrán y la canela. Tapa y deja cocer a fuego lento 40-45 minutos, o hasta que las carnes queden muy tiernas.

Prepara el cuscús siguiendo las indicaciones del envase, si es precocido normalmente mezclando la misma cantidad de agua hirviendo con la sémola, removiendo y dejando reposar unos minutos. Si quieres le puedes añadir algo de sal y mantequilla (una cucharada) para que quede más sabroso. Remueve con un tenedor y sirve al momento con el estofado, decorando con perejil picado.

Esta receta de cuscús con habas, canela y azafrán puede hacerse igualmente con garbanzos, y enriquecerse con otras verduras, como calabaza, calabacines, zanahorias, etc. Si te gusta un poco picante puedes diluir un poco de harissa (salsa picante de chiles) en el caldo a la hora de servirlo.