El ajoblanco es uno de los platos tradicionales más famosos de Málaga, una refrescante sopa fría de ajos y almendras que se suele acompañar de uvas moscatel o alguna fruta como dados de manzana o de melón, que crean un contraste agridulce muy interesante. Hay muchas variaciones de esta receta de ajoblanco malagueño en la nueva cocina, como el ajoblanco de cerezas, o el ajoblanco de coco.
El auténtico ajoblanco debe tener un intenso sabor a ajo, pero si no te gusta muy fuerte puedes reducir la cantidad.
Ingredientes, para 4 personas
200 gr. almendras peladas, 4 dientes de ajo pelados, 600 cc. agua muy fría, 100 gr. pan duro remojado, sin corteza, 200 cc. aceite de oliva virgen, 50-80 cc. vinagre de vino blanco o de manzana, una cucharadita de sal.
100 gr. uvas moscatel, o de manzana o melón, para servir.
Elaboración
Introduce en la batidora de vaso o en thermomix todos los ingredientes y tritura 5 minutos o hasta que quede una crema muy fina. Guarda en el congelador hasta que esté muy frío.
Ajusta de vinagre y sal a tu gusto antes de servir. Debe tener un punto ácido que compensa el dulzor de las almendras, y el toque picante del ajo. Si sirve esta ajoblanco malagueño muy frío, en plato sopero o tazones, acompañado de uvas moscatel, dados de melón o manzana, a veces incluso con pasas de Málaga, si no hay otra cosa.
Con estos calores que no nos quieren abandonar siguen apeteciendo platos de este tipo.
Buenísimo este ajoblanco, es una de mis sopas frias favoritas.
Saludos
Rico, rico.
Tengo que hacerlo, ya Carlos me ha dicho que tiene ganas de comerlo al ver tu receta y yo hace un siglo que no lo como. Y como dice Olimpia con este calor todavía apetece.
Un saludo.
Jeje, bueno, siempre es buen momento para un ajoblanco, está muy rico.
Un abrazo.
Buenisimo Pepe, con uvas Moscatel es un manjar de Dioses. Cuando estoy en verano en Malaga no me falta ni el ajoblanco bien fresquito ni el gazpacho.
Creo que he visto alguna vez a mi madre comiendolo con higos frescos bien maduros, buenisimos.
Un beso Pepe!!!