Otra nueva noticia que nos comenta nuestra amiga Inma en su blog.
Un grupo de investigación de la Universidad de Extremadura (UEx) de Enfermedades Metabólicas Óseas ha publicado un estudio sobre los efectos beneficiosos que tiene el consumo moderado de cerveza sobre la calidad del hueso en las mujeres, según publican en la revista «Nutrition».
Los investigadores Juan Diego Pedrera Zamorano, Jesús Maria Lavado García, Raúl Roncero Martín, Julián Fernando Calderón García, Trinidad Rodríguez Domínguez y Maria Luz Canal Macías han publicado un estudio sobre 1.697 mujeres sanas de la provincia de Cáceres, en concreto, 710 premenopáusicas, 176 en la peri menopausia (plazo de tiempo que lleva a la menopausia) y 811 posmenopáusicas.
Los valores sobre la calidad del hueso se analizaron mediante densitometría ósea de las falanges, que permite medir la masa ósea. Los resultados demostraron que las bebedoras moderadas de cerveza presentaban una mayor masa ósea en la falange que las no bebedoras, informó la UEx en nota de prensa.
Para obtener este efecto positivo, el consumo debía realizarse en la dieta diaria mediante un tiempo prolongado. En este punto, el coordinador del grupo Juan Diego Pedrera, incide en que la línea que separa la ingesta moderada de alcohol y el abuso es muy fina, y que cualquier tipo de exceso implica daño en la estructura ósea del cuerpo humano, y puede ocasionar serios problemas de salud.
La cerveza es un componente común en la dieta mediterránea y beneficiosa gracias a su contenido entre otros de fitoestrógenos y silicio.
Los fitoestrógenos presentan una actividad estrogénica elevada, y se ha demostrado que protegen el hueso, y el silicio produce efectos beneficiosos sobre la salud del hueso. Los efectos óptimos sobre el hueso pueden deberse al efecto de la combinación de estos componentes.
Así que a partir de ahora seria muy interesante incluir siempre moderadamente la cerveza en nuestra dieta, ¿no creéis?
Joerrr, pues qué mal lo llevo, porque no me gusta nada la cerveza, la odio. Soy un bicho raro en este país, lo sé.
Jeje, debes ser de las pocas que no les gusta, es verdad. Bueno, recuerdo que a mi de pequeño tampoco me gustaba, me parecía muy amarga..debe ser como todo, una vez te acostumbras..:-)