Ayer ya os contaba lo contento que estoy con mi nueva piedra de horno, especial para pizzas y panes. Parece increíble que este sencillo accesorio pueda aportar a la pizza esa textura tan especial y crujiente que nos recuerda a los hornos tradicionales de leña donde se suelen preparar en Italia y en las buenas pizzerías de todo el mundo. Alguien me preguntaba sobre los ingredientes, así que mejor os dejo aquí mi receta de pizza a la piedra.

He usado unos cuantos ingredientes, que suelo combinar a mi manera. Siempre me gusta añadir champiñones y verduras, y los tomates cherry siempre quedan bien, con un intenso sabor dulce muy agradable y que combina bien con el salado del jamón serrano.

Ingredientes, para una pizza grande (para dos personas)

Para la masa: 180 gr. harina de fuerza, 100 gr. agua, media cucharadita de sal fina, media cucharadita de levadura seca de panadero, media cucharadita de aceite de oliva, una cucharadita de azúcar.

Para el relleno: 80 gr. passata de pomodoro (o tomate triturado escurrido), un pimiento verde, 6 tomates cherry, 100 gr. mozzarella, 4 lonchas finas de jamón serrano, una cucharadita de orégano, 100 gr. champiñones.

Elaboración

Prepara la masa siguiendo nuestros consejos (para ver la receta haz click aquí). Para ello mezcla la harina con la sal, el azúcar y la levadura seca, haz un volcán en el centro y añade el agua y el aceite. Remueve bien con las manos hasta mezclar. Amasa unos 5 minutos sobre la mesa enharinada, hasta que la masa quede ligera. Deja fermentar 30-40 minutos en sitio cálido, en un cuenco aceitado y tapado con film.

Introduce la piedra en el horno apagado, en frío. Lo mejor es sobre la rejilla, en la primera ranura de la parte baja, en la base del horno. Enciende el horno a 200-220º, y deja calentar unos 30 minutos, mientras esperas que fermente la masa, para que vaya tomando la temperatura ideal.

Si usas otra piedra más gruesa hay que seguir las recomendaciones del fabricante, pero tardaría más tiempo en calentarse, puede llegar a una hora incluso. Esta piedra para pizzas, al ser más fina, se calienta antes.

Estira la masa, una vez ha subido el doble de su volumen. Usa el rodillo, sobre la mesa enharinada, hasta que quede muy fina. Lo ideal es tener una pala de madera especial, pero si no la tienes, coloca la masa sobre un papel de horno enharinado ligeramente, puesto sobre una tabla de madera o similar.

Cubre la masa con la passata o tomate triturado muy bien escurrido sobre un colador fino. Añade la mozzarella cortada, el orégano, el pimiento en trozos, los champiñones en láminas, los tomates cherry cortados por la mitad y el jamón.

Sube la temperatura del horno, hasta 230º. El paso siguiente requiere cierta práctica, y lo suyo es disponer de una pala ancha de madera especial para panes. Sin mover la piedra del horno, vuelca con cuidado la pizza sobre ella, ayudándote de la pala enharinada, o en este caso la tabla de madera. Si quieres puedes espolvorear la piedra con semolina fina o harina antes de poner la pizza. Cierra el horno y deja cocer 15-20 minutos, o hasta que esté en su punto, bien dorada y crujiente.

Sirve esta receta de pizza a la piedra sacando la piedra del horno con cuidado, usando guantes de horno aislantes. La piedra que tengo trae un soporte para ponerla en la mesa, o también la puedes poner sobre una tabla, y servirla así. No olvides que no debes golpear la piedra ni lavarla hasta que esté completamente fría (mejor sin detergentes).